Como ya sabemos, los errores con Hacienda pueden hacernos pasar un mal trago e, incluso, dar lugar a una sanción. Por ello, cada trámite que se realiza, nos aseguramos de tener bien claros todos los datos y, sobre todo, conocerlos a la perfección.
En esta ocasión, se va a centrar el artículo en conocer a fondo el domicilio fiscal y la opción de alquilar uno en espacios de coworking. ¿Te lo vas a perder?
¿Qué es un domicilio fiscal?
Muchas veces nos hemos preguntado si nuestras domiciliaciones fiscales Madrid son correctas, sobre todo, cuando se es autónomo. Entre domicilio fiscal, social o comercial, existe una especie de confusión que nos hace dudar si nuestros datos impositivos están correctamente asignados.
Por ello, en este apartado te definimos el domicilio fiscal los más sencillo posible.
En otras palabras, donde una persona física o jurídica realiza sus obligaciones fiscales con la Agencia Tributaria.
Así, una domiciliación de sociedades Madrid será aquel lugar donde se desarrolle la actividad. En muchas ocasiones, el domicilio fiscal puede coincidir con la residencia del autónomo, por lo que Hacienda considera esta dirección como el lugar donde el autónomo desarrolla su ejercicio económico.
Pues bien, este tema se está convirtiendo en uno de los más complicado para los autónomos porque las ventajas tributarias de tener tu domicilio fiscal en tu residencia habitual son muy escasas.
En este sentido, existen una serie de alternativas para las domiciliaciones fiscales Madrid: alquilar un domicilio fiscal en un espacio de coworking u oficina virtual.
Pero, antes, profundicemos un poco más en el concepto.
¿Cuándo declaras tu dirección fiscal?
En primer lugar, al iniciar tus actividades profesionales. Cuando te das de alta como autónomo en RETA y en el Ministerio de Hacienda, debes aportar una dirección fiscal del momento presente.
En segundo lugar, a la hora de hacer las declaraciones de los modelos 036 y 037 del IVA.
Hoy en día, debido a la situación que se vive, todos estos trámites se pueden realizar de forma electrónica desde el sitio web de la Agencia Tributaria. El procedimiento es muy sencillo e intuitivo.
¿Sabes qué diferencia existe entre el domicilio fiscal, el domicilio comercial y domicilio social?
Con total probabilidad, una persona, ya sea física o jurídica, puede tener los distintos domicilios de los que hablemos, pero, a veces, es difícil determinar la diferencia entre los mismos.
Por este motivo, hoy te explicamos en qué consiste cada uno de ellos, empezando por el domicilio real.
El domicilio real es el lugar donde tenemos nuestra residencia habitual. En definitiva, donde vivimos y hacemos nuestro día a día. Así, salvo que seas un nómada empedernido, el domicilio real será el lugar donde estés empadronado. Hacienda define este concepto como domicilio habitual.
Por otra parte, el domicilio social es completamente diferente. Aquí entramos a hablar del lugar desde donde la empresa se gestiona o se administra. En este sentido, toda empresa tiene siempre un domicilio social que, por ley, deberá estar registrado en el Registro Mercantil correspondiente.
El domicilio comercial, sin embargo, es el lugar físico donde el trabajador recibe a sus clientes. En muchas ocasiones puede coincidir con el domicilio social, pero no en todas. Por eso, hay que tener muy clara esta diferencia: el domicilio comercial es el que añadirás en tus tarjetas de presentación. Sencillo, ¿verdad?
Por último, como ya se ha comentado con anterioridad, el domicilio fiscal es el lugar donde una persona, ya sea física o jurídica, recibe cualquier tipo de notificación de la Agencia Tributaria. Por este motivo, se suele poner el domicilio donde siempre vas estar, o mejor aún, el domicilio donde siempre va a haber alguien que pueda recibir tus comunicados en tu nombre.
Es posible que todas las direcciones de las que hablamos estén en un mismo lugar, sobre todo, cuando eres autónomo. Pero, ¿es lo mejor? Existen opciones que te dan unos mayores beneficios fiscales que esta y en los siguientes apartados te los contamos.
¿Qué ventajas tiene alquilar un domicilio fiscal?
Son miles las personas que no piensan en las ventajas que puede tener cambiar al domicilio fiscal a un lugar ajeno a su residencia habitual, pero la realidad es que son fundamentales para ahorra algo de dinero en tus declaraciones fiscales.
¡Descubre cómo en este apartado puedes conseguir que el domicilio habitual sea el domicilio fiscal!
Si trabajas por cuenta ajena, es decir, eres autónomo o freelancer, lo más probable es que el domicilio fiscal sea tu domicilio habitual, en el que también vives. No obstante, como hemos comentado, contar con una alternativa diferente puede ser muy cómodo y beneficioso para ti.
Estas alternativas de las que hablamos son alquilar el domicilio fiscal, como puede ser una oficina virtual o un coworking. ¿Has oído hablar de ellos? Cada vez son más frecuentes estos espacios de trabajo, donde alquilar una zona de oficina para trabajar en tu negocio.
Es muy cómodo y, sobre todo, te ofrece multitud de ventajas fiscales. Además, te permite separar tu actividad profesional de tu actividad personal, así como, lograr desconectar cuando llegas a casa.
Las oficinas virtuales, además, un centro donde se pueden disfrutar de multitud de servicios, no sólo fiscales, sino también la atención telefónica, el uso del despacho para las visitas de clientes y la recepción de correo.
En cuanto a trámites, si optas por alquilar un domicilio fiscal, debes recodar cambiar la dirección cuando vaya a presentar los modelos 036 o 037 del IVA o cuando vayas a darte de alta en la Agencia Tributaria.
Las ventajas de tener el domicilio fiscal en un coworking o en una oficial virtual se pueden resumir en las siguientes:
1. Profesionalidad
Contar con un domicilio fiscal en un coworking aporta una imagen más profesional a tu trabajo, ya que permite a tus clientes visitarte o tener reuniones en un lugar preparado para ello.
Además, tener domiciliaciones fiscales Madrid, en el corazón financiero de la ciudad, te aporta un mayor prestigio y la percepción de los clientes de tu marca o actividad económica.
2. Servicios adicionales
Contar con una oficina virtual o un coworking tiene como segunda ventaja el disfrute de los servicios que ofrecen a las empresas o autónomos domiciliados en estos espacios.
Entre estos servicios, como se ha nombrado con anterioridad, podemos encontrar la recepción de llamadas telefónicas, las visitas de clientes, la gestión de correspondencia o las reuniones con proveedores.
Todo esto es clave para aumentar tu productividad y para ahorrar en temas de gestión, ya que, en tu casa, no cuentas con la infraestructura necesaria para todos estos aspectos.
3. Ahorro fiscal
Optar por este tipo de domicilio fiscal aporta al autónomo una serie de ventajas fiscales que no obtienes si cuentan con el domicilio en tu hogar.
La primera de ellas es que podrás contabilizar como gasto deducible en el IRPF el alquiler del espacio de coworking.
No olvides además que, la nueva ley de autónomos establece que se puede deducir el 30% del porcentaje de viviendas declaradas para actividad económica de los gastos de servicios públicos. Sin embargo, si lo miras con atención y haces cálculos matemáticos, encontrarás que la cantidad a deducir es pequeña.
Por tanto, conviene plantearse este tipo de alternativas potencialmente muy interesantes para establecer un nuevo domicilio fiscal.
Hoy en día, alternativas como las oficinas virtuales o el coworking son más populares que nunca, ya que alquilar este tipo de espacios es muy cómodo y la variedad de domiciliaciones fiscales Madrid es tan amplia que se adapta a multitud de bolsillo.
4. Privacidad
Por último, pero no menos importante, la privacidad. Es una de sus principales ventajas. La dirección de tu empresa, cuando tu dirección es tu domicilio habitual, aparecerá en las facturas que emites tanto a clientes como a proveedores.
Esto quiere decir que la dirección de tu casa será conocida por todas estas personas y podrán buscarte allí. Por eso, una gran opción es el alquiler de estos espacios de trabajo.
Recuerda que en estos lugares podrás mantener reuniones de trabajo con tus clientes optando con todas las facilidades que ofrecen los coworking y, además, dando una imagen corporativa mucho más profesional que si atiendes a tus clientes o proveedores en casa.
Por otra parte, te permite separar tu vida privada de tu vida profesional que si ya es difícil cuando eres autónomo, si tienes la oficina en casa, aún más. Como hemos comentado con anterioridad, el incremento de la productividad está asegurado.
La importancia del domicilio fiscal para los autónomos
Ha quedado claro que tener bien definido el domicilio fiscal es clave para una buena gestión de todos los aspectos tributarios, ya que, cuando informas a Hacienda de tu dirección, están indicando, no sólo donde ubicarte, sino también, donde estás inscrito y a qué sistema fiscal.
Por eso, esta información es tan relevante, porque determina la oficina que le corresponde para gestionar sus trámites. A su vez, se deja bien claro la ubicación de la notificación, los posibles procedimientos administrativos y el control fiscal.
No olvides, además, tener presente la diferencia entre las personas físicas y las jurídicas porque ambas tienen que tener un domicilio fiscal. Por eso, para terminar el artículo, te explicamos bien esta diferencia y completar, así, todo lo que necesitas saber acerca del domicilio fiscal.
La diferencia entre una persona física y una persona jurídica
En primer lugar, aclararemos los dos tipos de personas reconocidas por la ley: las personas físicas y las personas jurídicas.
Las personas físicas y las personas jurídicas son una antigua diferencia en el campo del derecho que seguro conocerás. Pero, debes tener claro estos dos conceptos. ¡Vamos a contarte la diferencia!
Por un lado, una persona física es un ser humano. El propio Código Civil lo define como el ser humano » una vez producido el entero desprendimiento del seno materno”. Este ser humano tiene una serie de atributos, derechos y obligaciones por el simple hecho de ser una persona, y uno de ellos es tener una dirección.
Por otro lado, las personas jurídicas son aquellos donde ya no hay individuos naturales, sino que se trata de unas creaciones humanas. Una persona jurídica puede ser una organización, institución o empresa. Las personas físicas son solo ciudadanos. Sin embargo, una persona jurídica puede estar formada por una o más personas físicas. En cualquier caso, es seguro que también tendrá domicilio fiscal.
En definitiva, es bueno contar con estas alternativas de alquiler del domicilio fiscal y conocerlas bien. Como has podido leer a lo largo del texto, las ventajas son numerosas y tu crecimiento como profesional será más notorio.
El domicilio fiscal lo es todo para todas tus gestiones con la Agencia Tributaria y si, optando por una oficina virtual o un coworking, aumentas tus reseñas positivas sobre tu marca o negocio, todo parece estar a favor.
Además, las opciones son muy numerosas en la capital. ¿Te imaginas tener una oficina virtual en el pleno pulmón financiero de Madrid? Pues es posible. La variedad de alquiler de estos domicilios fiscales es muy amplia y se adapta a muchos precios.
Compensa con la cantidad de ventajas que ofrece, ¿verdad?
Así que, ¡no dudes en dar el paso! El crecimiento de tu negocio está en tus manos y todos los aspectos cuentan. Recuerda, además, que las gestiones con la Agencia Tributaria son claves.
Y, como hablamos al inicio de este artículo, los errores con Hacienda pueden dar lugar a sanciones y a momentos que no son nada agradables para el autónomo. Ahora que ya sabes todo lo que tienes que saber sobre el domicilio fiscal, ya puedes estar tranquilo.
Si tienes alguna duda, no dudes en contactar con nosotros. Te aclararemos todas las que te surjan y te ayudaremos a encontrar las mejores opciones para tu negocio y para tu bolsillo. ¿Alquilar un domicilio fiscal? Sin duda es un sí. Las ventajas ganan, esta vez, a las desventajas, y tu imagen corporativa mejorará frente a tus clientes potenciales y frente a tus proveedores, cuya confianza será mayor.